martes, 21 de diciembre de 2010

Odié siempre la colonia de mi club y la de cualquier club.

Siempre odié la colonia, ese lugar horrible donde te obligaban a ir tus padres durante el verano. Lo odié con toda mi alma. Venía un nefasto micro a buscarnos. Como vacas al matadero. Hoy después de darle la alfalfa a la mañana a mi pequeño ternero, lo mandé directo al matarife que tanto detesté.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Jajaja.

No es tan mala!

Yo fui a ese colonia por muchos años.

Es una onda "Cuenta conmigo" por momentos.

cienperros dijo...

Es el mismísimo infierno. Pero volvió contento.

Anónimo dijo...

Sos un ser horrible... no le hagas eso a los niños.

Anónimo dijo...

Pero... si bien sos un ser horrible, quiero salir en "Seré genial"... Puedo? Dale... ya salió Mati...

PD: yo tambien fui a la colonia, pero en este caso papa y mama no me obligaron. Creo.

Mechi.

Euge dijo...

la colonia!! puuuuaaajjj!! yo no iba casi nunca, vomitaba justo antes de salir..